La Neurociencia viene revelando en los últimos años los increíbles misterios que el cerebro y su funcionamiento, aportan al campo pedagógico.
Cerebro, Mente y Educación es un movimiento integrado por Neuro-científicos, Psicólogos y Educadores, quienes trabajando juntos y apoyados en la tecnología de hoy nos están dando los mapas que nos guían con mayor precisión en la educación. La clave ya no es aprender mucha información, pues a ella tenemos acceso haciendo “clic” con un dedo. Lo importante es qué hacemos con esa información y cómo la usamos de una manera proactiva y productiva. Para esto, el secreto es: Aprender a pensar, pensar para aprender y comprender .
Con los avances científicos y las prácticas educativas que se están dando en los colegios del mundo, los educadores tenemos ahora lo que hemos llamado el “GPS” de la educación que nos da esas guías prácticas para lograr el cambio.
Una parte importante de ese “GPS” es el Mapa de la Comprensión que nos da la Universidad de Harvard . Es una guía de los movimientos mentales que debemos fomentar en los niños para generar hábitos de comprensión. Simplemente quiere decir que si queremos comprender algo, es importante que lo usemos.
Project Zero. Universidad de Harvard.
Mapa de la Comprensión.
Surgió de una pregunta que le hicieron hace más de 20 años a David Perkins sobre qué hay que hacer mentalmente para comprender un concepto, entonces él se reunió Patricia Palmer y Ron Ritchhart y empezaron a pensar en las habilidades de pensamiento que los estudiantes deben usar para desarrollar la comprensión.
Ron Ritchhhart. Universidad de Harvard.
Ellos quisieron definir categorías grandes que ayuden al maestro a saber qué tiene que tener en cuenta cuando está diseñando actividades, porque eso es lo que va a medir el nivel de complejidad del pensamiento del estudiante y lo que al final va a garantizar que comprenda o no.
Así es como Identificaron los movimientos del pensamiento de alto nivel que permiten desarrollar bien la comprensión.
Descripción de los diferentes tipos de pensamiento.
Observar de cerca y describir qué hay ahí.
Hacer notar las partes y las características de un fenómeno, siendo capaz de describirlo en detalle y su totalidad.
Construir explicaciones e interpretaciones.
Examinar detenidamente características y detalles de un objeto o evento, cómo funciona, cuáles son sus roles y propósitos para generar múltiples explicaciones de por qué algo es como es.
Razonar con evidencias.
Buscar evidencias que permitan ofrecer razones y argumenten la veracidad de sus explicaciones.
Establecer conexiones.
Relacionar lo nuevo con lo conocido a partir de las experiencias pasadas. Este vínculo también puede consistir en aplicaciones y dónde se utilizan estas nuevas ideas o habilidades. Todas estas conexiones ayudan a recuperar la información adquirida, asegurándonos de que no sea estática.
Tener en cuenta diferentes puntos de vista y perspectivas.
Identificar las diferentes perspectivas que pueden estar presentes o que se ven afectadas por lo que se acaba de leer, observar o escuchar.
Captar lo esencial y llegar a conclusiones.
Consiste en captar el núcleo de un concepto, procedimiento o fenómeno, asegurando la comprensión de su esencia y de qué se trata verdaderamente. A la vez que se examinan los detalles, asegurarse de no perder el foco de las ideas principales que están en juego.
Preguntarse y hacer preguntas.
La curiosidad despierta el cuestionamiento sobre el aprendizaje de un fenómeno y actúa como vehículo para impulsar el aprendizaje y desarrollar la comprensión. Las preguntas que nacen a partir de esta curiosidad son un reflejo de la profundidad de nuestra comprensión.
Descubrir complejidad e ir más allá de la superficie.
Se relaciona con profundizar llegando a ámbitos más complejos del tema o fenómeno, recorriendo de nuevo los movimientos con nuevos hallazgos.
Cómo se utiliza el Mapa de la Comprensión.
El Mapa de la Comprensión puede convertirse en un recurso útil para valorar y hacer visible el pensamiento, considerando por ejemplo, las siguientes estrategias en su implementación:
- Se fomenta la reflexión antes, en medio o al final de una experiencia de aprendizaje, para discutir qué tipos movimientos del mapa de pensamiento estuvieron o estarán involucrados en ella.
- Se incluyen en la planificación de los objetivos de la clase. Asumiendo que para lograr el desarrollo de la comprensión durante una unidad didáctica, los estudiantes deberían estar expuestos a diferenteexperiencias que involucren todos los tipos de movimientos , si es posible, en más de una ocasión.
- Realizar actividades que promuevan todos los movimientos de pensamiento utilizados durante una unidad de aprendizaje ,en la que se expliciten dónde y cuándo utilizaron dichos tipos de pensamiento, de tal forma que el estudiante sea capaz de reconocer qué tipos de pensamiento utilizó y de paso, haga visible su pensamiento.
Por qué es importante usarlo.
Debemos usar el pensamiento como estrategia pedagógica, vivimos en la era de la inteligencia y es importante trabajar el pensamiento y hacerlo visible. Las personas aprenden mejor cuando comparten ideas, ven, escuchan y hacen su pensamiento visible. Necesitamos pensar para comprender y a partir de ahí solucionar problemas, usar y transferir el conocimiento. Nuestro objetivo ya no es puramente curricular, tenemos que tener objetivos de comprensión. ¿Cómo se aprende de forma consciente? ¿Qué hábitos se promueven? Hay que hacerlos explícitos en clase, concienciar al alumno de su propio proceso de pensamiento.
¿Quiere que nos pongamos en contacto con usted?
Cumplimente este formulario por favor.