Colegio Salzillo, 50 años formando personas
Medio siglo de vocación, innovación y compromiso educativo.
El Colegio Salzillo conmemora su 50 aniversario celebrando una trayectoria educativa marcada por la coherencia, la visión de futuro y un profundo compromiso con la formación integral del alumnado. Cinco décadas después de su fundación, el lema que acompaña esta efeméride, “50 años formando personas”, sintetiza con precisión la esencia de un proyecto que ha sabido crecer y transformarse sin perder su identidad.
Un sueño educativo que nació en 1976
La historia del Colegio Salzillo comienza el 4 de octubre de 1976, en una España que daba sus primeros pasos en democracia. Fue entonces cuando Don Luis Cases y Doña Caridad de Lara, movidos por una vocación educativa ejemplar, decidieron fundar un colegio en Molina de Segura para dar respuesta a las necesidades escolares del municipio. Con cinco hijos, escasos recursos materiales y una firme confianza en la educación como motor de transformación social, iniciaron un proyecto que abriría sus puertas con un solo pabellón y 100 alumnos, en un contexto social complejo marcado por huelgas y manifestaciones.
Crecimiento, consolidación y sentido de comunidad.
El proyecto inicial, concebido para 16 unidades de la antigua EGB, experimentó un crecimiento extraordinario. En apenas tres años, el alumnado pasó de 100 a 600 estudiantes, lo que hizo necesaria la ampliación del centro y la construcción, en 1979, del edificio que hoy alberga la Educación Secundaria. En el curso 1983-84 se incorporaron los primeros grupos de Bachillerato, consolidando una oferta educativa completa que ha seguido ampliándose hasta alcanzar los 1.159 alumnos actuales, desde los 2 años hasta Bachillerato y Formación Profesional.
Este crecimiento ha ido siempre acompañado de un fuerte sentimiento de pertenencia: cada alumno, cada familia y cada profesional forma parte de una gran familia educativa, en la que el acompañamiento personal y la atención a las necesidades individuales son señas de identidad.
Innovar para educar personas
Desde sus orígenes, el Colegio Salzillo apostó decididamente por la innovación educativa. Ya en sus primeros años incorporó recursos poco habituales en la época, como el laboratorio de idiomas, anticipando una visión abierta al mundo y al aprendizaje de lenguas. Con el paso del tiempo, esta vocación innovadora se ha traducido en una profunda transformación metodológica: las aulas han evolucionado desde modelos centrados en el profesor y el trabajo individual hacia espacios flexibles, donde el alumnado aprende de forma colaborativa, desarrolla el pensamiento crítico y asume un papel activo en su propio proceso de aprendizaje.
Un modelo educativo de referencia
El proyecto pedagógico del Salzillo se ha visto enriquecido por la influencia de referentes internacionales de primer nivel. Las aportaciones del Aprendizaje Basado en el Pensamiento (TBL), impulsado por el Dr. Robert Swartz, el Modelo VESS (Vida Equilibrada con Sentido y Sabiduría), desarrollado por los doctores Gilberto Pinzón y Ana María Fernández, y los avances de la neuroeducación, han permitido construir un modelo sólido, coherente y reconocido. El objetivo es claro: educar personas ejemplares, con autonomía personal e intelectual, capaces de considerar distintas perspectivas, tomar decisiones responsables y comprometerse activamente con la mejora de la sociedad.
Proyección nacional e internacional.
Hoy, el Colegio Salzillo es centro bilingüe desde los dos años, centro oficial de Cambridge y Alianza Francesa, y cuenta con certificaciones como colegio TBL y VESS, además de profesorado que actúa como formador y coach de estos modelos. Su participación en congresos internacionales y el intercambio de experiencias con centros de países como Chile o Finlandia, así como la creación de la consultora educativa Denueve, han reforzado su proyección y su visión de ser un referente educativo a nivel nacional.
Una gran familia con mirada al futuro.
Detrás de este proyecto hay un equipo estable de profesionales, docentes y no docentes, que trabajan coordinadamente en un clima de libertad, respeto y corresponsabilidad. Bajo los valores de vocación, innovación y compromiso, el Colegio Salzillo mantiene intacta su misión: acompañar a cada alumno para que descubra sus talentos, desarrolle lo mejor de sí mismo y construya una vida equilibrada, con sentido y sabiduría.
Celebrar 50 años formando personas es, al mismo tiempo, un reconocimiento al camino recorrido y una declaración de intenciones hacia el futuro. Un futuro que el Colegio Salzillo seguirá construyendo con la misma ilusión de 1976 y con la firme convicción de que educar es transformar vidas.
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